-Mi querida Esposita- dijo Ángel al abrir la puerta de la habitación, habían llegado los dos al hotel junto a la Playa- Bienvenida a tus vacaciones, o quizas nuestra segunda luna de Miel. 

-Ay Ángel, esto es maravilloso, gracias por la sorpresa, me encanta. 

-Lo sé amor, y lo mejor está por venir- dijo Ángel, sonriendo alegremente. Jaló las maletas hacia adentro, la habitación tenía vista a la playa, un lugar hermoso de la Riviera Maya, donde recordarían los hermosos momentos de su luna de miel, y también celebrarían su cumpleaños. Era de noche y la luz de la luna alumbraba la habitación.

-Amor estamos cansado por el viaje, será mejor que descansemos, mañana tenemos muchas sorpresas para mi bella esposita. 

-Con tu amor es suficiente- dijo Mimí, pero en el fondo había aún un sueño que le faltaba por cumplir, sonrió en silencio para si misma y se acostó para dormir. 

Ambos durmieron plácidamente, Ángel se despertó muy temprano y pidió el desayuno en la habitación, la luza del día pintaba un bello paisaje en la playa. 

-Feliz Cumpleaños mi Bubu- Dijo Ángel, acercandose suavemente para despertar a Mimí, ella parpadeó y lo miró. 

-Gracias amor.

-Despierta dormilona- Mimí se sintió colorada, porque esa expresión la había memorizado antes, con ese amor platónico que tenía guardado en el corazón. Respiró hondo para no sentirse avergonzada. Se sentó en la cama para empezar a desayunar, todo estaba delicioso. 

-¿Te gustó el desayuno?- preguntó Ángel 

-Claro estaba delicioso, muchas gracias. 

-Amor, vamos al comedor del hotel, te espera otra sorpresa. 

Mimí no sabía lo que le esperaba en el comedor, en una de las mesas habían tres mujeres, hablando sobre el calor que hacía, una de ellas estaba platicando y escribiendo con vehemencia en el teléfono. 

-¿Qué te dice?- dijo Rubby.

-Que ya está por llegar- dijo Carla.

-No te preocupes, claro que vendrá- dijo Lorena- sólo tengo miedo de que a Ángel no le guste. 

-Al cuñis se le ocurrió esto, la verdad, él sabe lo que nos une como hermanas y si eso le encanta a Mimí, no podría enojarse, él es feliz- dijo Rubby. 

-Ángel me dice que ya están bajando, esperemos que llegue a tiempo- dijo Carla, guardó el teléfono, acomodó la canasta de flores que estaba en la mesa y se tomó un selfie junto a las flores. 

-No puede ser -dijo Mimí al ver quienes estaban en la mesa del comedor, sus amigas que eran casi sus hermanas estaban ahí esperándola, miró a su esposo- no es cierto. 

-Bueno amor, entre mis cuñis y yo quisimos darte una sorpresa, pasar un buen rato a tu lado y celebrar la vida de mi linda Nohemí. 

-Muchas gracias,eso es maravilloso- Mimí lo abrazó y corrió a ver a sus amigas.

-Mimii- dijo Carla- Feliz Cumpleaños hermanita hermosa.

-Pero Carli, viajaste desde Perú-dijo Mimi.

-Si, la verdad me urgía volver a México la verdad y qué mejor para volver a abrazarte.Feliz Cumpleaños.

-Es un enorme gesto- dijo Mimi- y mi peque Rubby.

-Aqui presente para festejar tu cumple hermosa- dijo Rubby abrazándola- te queremos mucho.

-Así es Mimi hermosa- dijo Lorena- te queremos mucho y quisimos festejar con ustedes este día especial.

-Y bueno esta fue idea de nuestro cuñis- dijo Rubby, se acercaron las tres a saludar a Ángel- Ángel nos escribió y ya sabes lo arrebatadas que somos.

-Lo sé- dijo Ángel- mis cuñaditas al final organizaron un lindo día para ti, pero empecemos por tomar este desayuno.

-¿Otro?- dijo Mimí sorprendida

-Yo sé que ya tuviste un rico despertar hoy- dijo Carla- pero ahora te toca pasarla con nosotras, y la verdad es que ya tengo hambre.

Todos rieron y se sentaron a la mesa, en el centro había una hermosa canasta de flores, rosas y astromelias, y en medio un globo con dedicatoria de Feliz Cumpleaños, Mimí se percató que había una pequeña tarjeta, no pudo leer lo que decía, porque se dió cuenta  de otra cosa, en la mesa había seis sillas, pero sólo eran cinco personas. 

-¿Esperamos a alguien más?- preguntó Mimi.

-Pues, espero que llegue pronto- dijo Carla, estaba escribiendo en el teléfono de nuevo.

-No me digas hermanita que ya tengo cuñado.

-Pues, no sé, ya veremos.

El mozo del hotel, llegó a tomar su orden, todos pidieron varias cosas para desayunar y Carla le pidió que traiga  el pedido especial. 

-Ay por fin ya llegó- dijo Lorena mirando hacia la entrada principal, un hombre alto, fornido, con estilo y muy elegante entraba con una pequeña maleta, MImi tenía el corazón latiendo a mil por hora, no podía ser cierto. 

-Bienvenido- dijo Ángel al ver al hombre, no tenía ningún signo de malestar, es más, se le notaba feliz ante el invitado. 

Fernando Colunga entró al comedor del hotel, con un traje blanco, camisa azul mar, con el pelo algo corto y una sonrisa maravillosa, había dejado su maleta en recepción y se acercó a la Cumpleañera.

-Felicidades Mimí, Feliz Cumpleaños- la abrazó, Mimí no podía reaccionar, estaba emocionada y sentía que el corazón se le iba a salir, lo abrazó y sintió el aroma tan peculiar. 

-Gracias Ángel, por permitirme compartir con tu esposa y tus cuñadas esta fecha tan especial. 

Angel y Fernando se dieron la mano y luego fue turno de las chicas de abrazar al invitado, tras los saludos, todos se sentaron y empezaron a comer y platicar, todo fue muy ameno, el mozo trajo luego un pequeño pastel de cumpleaños. Todos se pusieron de pie y empezaron a cantar las mañanitas, Mimí luego sopló las velas, y descanso que este momento no acabe nunca, partieron el pastel y recibieron un pedazo cada uno. 

-Gracias a todos, este fue el mejor cumpleaños.-dijo Mimí

-Te lo merece mi Bubu, te amo- dijo Ángel.

-Yo tambien- los esposos se abrazaron y se dieron un tierno beso. los demás aplaudieron pero Carla se percató de que a Fernando se le escapó un pequeño suspiro de tristeza, así que miró a sus amigas y entre las tres animaron a los demás a salir a pasear. 

-Estuvo rico todo, pero ya es hora de seguir disfrutando de este día maravilloso, porque no seguimos con nuestro plan chicas. 

-Si tienes razón Carli- dijo Lorena- vamos a caminar por la playa, de paso conocemos todos esta maravilla. 

-Si vamos- dijeron Rubby y Carla. se levantaron de la mesa y comenzaron a andar. Ángel también salió, dejando a Mimí y Fernando atrás.

-¿Puedo hablar contigo Mimi un momento?- dijo Fernando 

-Si claro- dijo Mimi.

-Pero por favor vamos caminando- Fernando la invitó a salir y caminaron despacio.

-Gracias -dijo Mimí sin verlo a los ojos.

-¿Por qué mi niña?

-Por esta sorpresa.

-Fue idea de Carla, Rubby y Lore, pero obvio quien estaba más emocionado con esto fue Ángel y se lo agradezco mucho.

-Fer- dijo Mimí, pero le sorprendió que Fernando la tomara de las manos, como pidiendo una oportunidad para expresar sus sentimientos. 

-Es hermoso saber que alguien tan especial como Ángel haya llegado a tu vida, eres una hermosa mujer, dulce, sensible y de un enorme corazón, eres leal y comprensiva, con una paciencia infinita, y aunque siento  que me pongo celoso de que tu cariño hacia mí haya podido desaparecer, sé que ahora eres feliz y eso me pone feliz a mi. 

-Mi Fer, mi cariño hacia esta siempre presente, te tengo guardado en un espacio especial en mi corazón, tu me enseñaste que soy una mujer valiosa y capaz de amar y ser amada, esa forma en la que muestras el amor en la pantalla gracias a tu talento nos impulsa  todas a seguir, a ser nosotras mismas, además de que me regalaste una nueva familia, hermanas que gracias a ti se han convertido en parte importante de mi vida, Ángel sabe lo que significas para mi y es feliz de que yo sea feliz. Gracias a ti volví a ser feliz y me ayudaste a encontrar la felicidad. 

Fernando la abrazó y Mimí se refugió en sus brazos, ese abrazo lleno de cariño y de mucho respeto fue el mejor regalo de todos, ella se sentía feliz, plena y muy emocionada. 

-Te quiero mi niña, siempre serás mi niña.

-Te quiero también  mi Fer, gracias por llegar a mi vida. 

-Gracias por tu cariño- Fernando puso las manos en la barbilla de Mí, buscó su mirada, se acercó tímidamente, y dejó un pequeño beso en la comisura de los labios. 

-Mi regalo- dijo Fernando muy coqueto

-El mejor del día- dijo Mimí, unas cuantas lágrimas salieron de sus ojos, que Fernando se encargó de limpiar con sus dedos. 

-Este dia recien comienza mi niña- dijo Fer- vamos niña mia,nos esperan, 

Ambos salieron hacia la Playa, los demás esperaban, era un día de muchas sopresa y recién estaba comenzando.